En las instalaciones de la compañía alemana de tecnología médica Dräger trabajan a todo gas para tratar de responder al gran volumen de pedidos de las autoridades sanitarias de diferentes países para atender a los pacientes de COVID-19 que están en las condiciones más criticas. En la actualidad, están produciendo casi el doble de ventiladores mecánicos, también conocidos como respiradores, que antes. Esperan llegar a cuadruplicar la producción.
Sin embargo, creen que no va a ser suficiente para responder a la demanda disparada a nivel mundial de este dispositivo clave en la pandemia de coronavirus. "Soy consciente de que, a pesar de todos nuestros esfuerzos, solo podemos satisfacer parcialmente la demanda actual en el mundo.