Polémica en Israel a raíz de las declaraciones de una diputada del partido ultranacionalista Sionismo Religioso y previsiblemente futura ministra, Orit Strok, quien ha insinuado que los médicos podrían negarse a atender a personas que "contravengan su fe religiosa", en alusión al colectivo LGTBI.
"Si se le pide a un médico que brinde algún tipo de tratamiento a alguien que viola su fe religiosa, si hay otro médico que puede hacerlo, entonces no se puede obligarlo a brindar tratamiento", dijo Strock este domingo en una entrevista con la radio pública israelí de Kan, desatando reacciones de todo el arco político.