Los días en los que el calor agobia Buenos Aires, la temperatura en esa habitación puede superar los 50 grados y apagar los proyectores por sobrecalentamiento. Es el tercer piso del Museo Sitio de Memoria ESMA, en el edificio que alguna vez fue Casino de Oficiales de la Armada y que, entre 1976 y 1983, fue uno de los centros clandestinos de detención, tortura y exterminio más emblemáticos de la última dictadura. Es, más específicamente, Capucha, el sector de este edificio en el que los detenidos-desaparecidos permanecían recluidos, con grilletes y la cabeza cubierta.