A sus espaldas, Samira Hamidi lleva años de especialización y trabajo en los derechos humanos, sobre todo los de las mujeres, y el proceso de paz en su país, Afganistán. Tras la victoria talibán, la responsable de campañas de Amnistía Internacional para Asia Meridional no puede evitar hablar en pasado al referirse a la vida de la población afgana.
Hamidi, amenazada por su labor, atiende a elDiario.es desde Colombo, Sri Lanka. La activista expresa su preocupación por quienes, como ella, defienden los derechos humanos en el país y teme que muchas personas en peligro se vean abandonadas a partir del 31 de agosto, fecha límite que Estados Unidos mantiene para salir de Afganistán.