"China no tiene mucha credibilidad porque no ha condenado la invasión ilegal". Es la interpretación que hace la OTAN del plan de paz que el Gobierno chino lleva semanas anunciando y que ha esbozado este viernes, coincidiendo con el aniversario del ataque ruso a Ucrania. Los aliados desdeñan esos doce puntos recogidos en la propuesta de Pekín debido a la alianza que mantiene con Vladimir Putin y con el convencimiento de que se está preparando para suministrarle ayuda militar.