La participación en la segunda vuelta de las elecciones municipales francesas se dirige a un mínimo histórico, después de que a falta de tres horas para el cierre de los colegios, la abstención subiera cuatro puntos con respecto a la registrada en el primer turno en marzo pasado.
A las 17.00 horas (15.00 GMT) había votado el 34,67% del censo, frente al 38,77% que lo había hecho a esa misma hora el pasado 15 de marzo, cuando al final del escrutinio la abstención marcó un récord de más del 55%.
La caída es superior si se compara con la registrada en las municipales de 2014, cuando a falta de tres horas para el cierre de los colegios, había votado el 52,36% del electorado.