Joe Biden mete presión a Boris Johnson por la gestión del postBrexit. En particular, por sus resistencias a aplicar el protocolo de Irlanda del Norte que él mismo firmó. Así, el presidente de Estados Unidos, con raíces irlandesas, ha llevado a Londres una advertencia en su primera reunión con el primer ministro británico: evitar que una disputa con la Unión Europea ponga en peligro la delicada paz en Irlanda del Norte, sellada con los Acuerdos de Viernes Santo de 1998. De fondo, el último conflicto es la "guerra de las salchichas", por la intención británica de prorrogar unilateralmente el periodo de gracia para llevar carnes refrigeradas de Gran Bretaña a Irlanda del Norte, que sí es parte del mercado único europeo.