Un nuevo impuesto que ha soliviantado a todo el sector del consumo. Desde el 1 de enero estará en vigor el impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizable. Gravará todos aquellos envases que sean de plástico no reciclado y a los que no se pueda dar una segunda vida. Da igual su finalidad, si sirven como recipientes de alimentos, en cualquiera de sus variedades, champú, colonia o envuelvan prendas de ropa, aunque hay excepciones. El objetivo es claro: eliminar de forma gradual el uso de este tipo de envases.