Desde hace unos años que la barba ha llegado para quedarse sobre el rostro masculino. Pasó de ser el símbolo de la dejadez, a un elemento de belleza que hay que cuidar, embellecer y tratar adecuadamente.
El primer sábado del mes de septiembre se celebra, cada año, el "Día Mundial de la barba", una circunstancia que nos recuerda que su origen se remonta a los vikingos de Dinamarca, un elemento de la belleza masculina que simboliza bravura, sabiduría y distinción.
Cortes, retoques e injertos para lucir este elemento de la estética masculina en pleno esplendor, que aunque a primera vista tenga como intención ocultar el rostro lo cierto es que su objetivo es embellecerlo.