El discurso del líder de Chega cala en esta ciudad fronteriza del Alentejo, donde la formación extremista inflama el odio contra la minoría gitana
Chega, el batiburrillo de la derecha radical portuguesa
Para terminar la primera semana de campaña electoral portuguesa, el líder de Chega, el ultra André Ventura, acudió a un mitin en una de sus plazas predilectas y voceó una grave acusación entre los asistentes: los gitanos de Elvas, municipio de 21.000 personas en el Alto Alentejo, fronterizo con Badajoz, habían creado un clima de “terror” en las escuelas municipales.