Tras la exposición a las cenizas procedentes de los incendios forestales de Australia, la nieve de los glaciares de Nueva Zelanda se ha tornado de color marrón. Según un experto consultado por The Guardian, el incidente podría aumentar el deshielo de los glaciares hasta un 30% durante esta temporada.

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— Fabulousmonster (@Rachelhatesit) January 2, 2020

El miércoles, varias zonas de la Isla del Sur amanecieron con una neblina anaranjada y un sol rojizo, después de que el humo de las llamas de Victoria y de Nueva Gales del Sur, las regiones australianas más afectadas por los incendios, se desviara hacia el este el martes por la noche, asfixiando muchas partes de la isla durante la mayor parte del día.

So here’s a wee timelapse I took this morning from my house showing the weird sky caused by smoke from the Aussie bushfires as it passes over Portobello. Totally weird day in the Deep South! ?@MetService? #weather #NewZealand pic.twitter.com/9y6TEMSIdk

— Ian Griffin (@iangriffin) January 1, 2020

La exprimera ministra de Nueva Zelanda, Helen Clark, ha expresado su preocupación en Twitter. "Así es como la tragedia de un país tiene efectos indirectos", ha dicho, señalando también que "es probable que el impacto de la ceniza en los glaciares acelere el deshielo". En Nueva Zelanda hay más de 3.000 glaciares; desde los años 70 los científicos han registrado una reducción de casi un tercio, y las estimaciones actuales predicen que desaparecerán por completo a finales de siglo.

Smoke from Australia's fires have traveled more 1200 miles and turned glaciers in the New Zealand Alps pink https://t.co/MYktFJuo4l pic.twitter.com/2QWBOUyQOT

— Brian Kahn (@blkahn) December 6, 2019

"Nunca había visto esta cantidad de ceniza, me preocupa ver tanta depositada en los glaciares", ha afirmado Andrew Mackintosh, exdirector del Antartic Research Centre, a The Guardian. El experto estima que el incidente puede aumentar entre un 20% y un 30% el deshielo de los glaciares durante esta temporada. Aunque considera que el impacto de las cenizas no durará más de un año, señala que si Australia continúa asolada por grandes incendios forestales y sequías, "será uno de los factores que aceleren la desaparición general de los glaciares de Nueva Zelanda". 

Según el Servicio de Meteorología, es la cuarta vez que las cenizas procedentes de los incendios del país vecino se expanden por Nueva Zelanda durante este verano austral. La oleada de incendios en el sur de Australia ya ha causado 17 muertos y un desaparecido, además de miles de evacuaciones.