Las pensiones subirán un 3,8% en 2024 para compensar la inflación

Las pensiones se prevé que se incrementen un 3,8% este 2024, según la inflación media del año. Se trata aún de una previsión, "no cerrada", indican en el Ministerio de Seguridad Social, ya que el último dato de IPC conocido hoy –de noviembre– es aún provisional. Fuentes del departamento que ahora lidera la ministra Elma Saiz precisan que la cifra de subida se confirmará "a final de año".

El alza de las pensiones cumplirá así con el mecanismo de revalorización de las pensiones que se aprobó con el último gobierno de coalición, en la primera pata de la reforma acordada con sindicatos y patronal, para mantener el poder adquisitivo de los pensionistas según la inflación media del año anterior.

La subida media resultante al final ha sido algo menor de lo estimada por el Ministerio de la Seguridad Social hace unos meses, del 4%, especialmente por el menor alza de los precios en este final de año. Este noviembre, el dato ha descendido del 3,5% de octubre al 3,2% interanual, por el abaratamiento de los carburantes y la electricidad.

Por su parte, el Ministerio de Seguridad Social ya informó de que prevé que las pensiones mínimas y no contributivas, las más bajas del sistema, se incrementen mucho más, un 6,8%.

Al igual que la subida del conjunto de pensiones, en el Ministerio de Seguridad Social precisan que el incremento "no está cerrado" todavía, por lo que habrá que esperar a este final de año para confirmar la cifra.

La previsión corresponde al informe 'Proyecciones del gasto público en pensiones en España', que publicó el Ministerio en octubre. En él, se proyectan las subidas de las pensiones más bajas del sistema para los próximos cuatro años, según lo acordado en la última reforma de pensiones.

Según las estimaciones del Ejecutivo, la pensión mínima de jubilación contributiva para los 65 o más años con cónyuge a cargo pasaría de los 13.527 euros anuales este 2023 (966 euros mensuales en 14 pagas) a los 16.472 euros al año (1.177 euros al mes) en 2027, casi un 22% más.

En el caso de la pensión no contributiva se prevé que pase de los 6.785 euros al año (485 euros al mes) en 2023 a los 8.236 euros anuales al final del periodo (588 euros al mes).

Como se viene haciendo en los últimos años con el salario mínimo, el Gobierno acordó en la reforma de pensiones establecer una meta para estas prestaciones relacionada con el umbral de la pobreza, para que estas pensiones más bajas vayan encaminándose poco a poco a esta referencia.

El Ministerio de la Seguridad Social también es responsable de otra subida clave para muchas familias en pobreza: el alza del ingreso mínimo vital (IMV).

De nuevo, en el Ministerio que dirige Elma Saiz explican que la cifra no está cerrada en estos momentos, pero si se acude a la ley que regula la renta mínima estatal, se establece que el IMV se revalorizará cada año como las pensiones no contributivas. Es decir, que la previsión señala a ese 6,8%.

En cualquier caso, habrá que esperar a la cifra oficial que informe el Gobierno, que aumentó en marzo de 2022 el IMV un 15% con motivo de la guerra en Ucrania y la crisis inflacionista. Aunque en un inicio fue un incremento para tres meses, el alza se fue prorrogando y también se mantuvo en 2023.

Por otro lado, habrá que ver también cómo queda en 2024 el llamado "complemento de ayuda a la infancia", las ayudas mensuales por hijo para familias de escasos recursos, pero que superan los umbrales de renta del IMV (hasta tres veces más). En 2023, las cuantías han sido, por cada hijo: