"Unas fronteras fuertes y un nuevo comienzo en materia de migración". Es el lema de las líneas maestras de la presidenta electa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentadas en julio pasado bajo el epígrafe "La protección de nuestro estilo de vida europeo", una de las seis claves que programáticas que presentó a principios de julio en el Parlamento Europeo.
Fue el 16 de julio, y entonces la Eurocámara asumía a regañadientes el acuerdo sellado por los líderes de la UE y ratificaba a la ministra de Defensa de Angela Merkel: 383 votos a favor –9 por encima de la mayoría necesaria, fundamentalmente de populares, socialdemócratas y liberales–, 327 en contra, 22 abstenciones y un voto nulo.